viernes, 31 de mayo de 2013

Friedrich Nietzsche

"La esperanza es el peor de los males, pues prolonga el tormento del hombre"

Friedrich Wilhem Nietzsche Röcken, cerca de Lützen, 15 de octubre de 1884 - Weimar, 25 de agosto de 1900 fue un filósofo, poeta, músico y filólogo alemán, considerado uno de los pensadore modernos más influyente del Siglo XIX.
Si los filósofos pos-modernos hablan del fin de la historia y de la bancarrota de la razón, Nietzsche proclamará la muerte de Dios. 
Él influyo a la posmodernidad con sus ideas y teorías del superhombre, la transmutación de valores y el eterno retorno.
Como todo filosofo, Nietzsche pasó por tres grandes etapas en su vida: el primer periodo fue de carácter romántico. En esta etapa escribe El origen de la tragedia (1872) y Consideraciones Intempestivas (1876); en la segunda etapa se aleja del ideal romántico para perfilarse como un investigador y conductor de la cultura humana y escribe obras como lo son Humano, demasiado humano (1870), Aurora (1881), La gaya ciencia (1882) y Pensamiento sobre prejuicios morales (1881); En su ultima etapa anuncia un nuevo ideal de existencia humana encarnada en el superhombre, así como una transmutación o cambio radical de todos los valores generalmente aceptados. Escribe su mas grande obra Así habla Zaratustra (1883).
El Nihilismo, del latín Nihil que significa "nada", al que Nietzsche denomina estático por que los antiguos sentidos de la religión, la fe, la felicidad, la sabiduría, etc., ya no tienen significación porque todo se supera, envejece, agoniza y finalmente muere. Alude a una doctrina que declara que nada posee una existencia real. Es cuando Nietzsche proclama la muerte de Dios motivo por el cual ya nada tiene sentido ni fundamento.
Los valores supremos para él es una voluntad decadente, una fatiga en la voluntad de poder en la que se exalta a los débiles desamparados, en la que la compasión la misericordia, la resignación y el sacrificio se convierten en valores máximos, la verdad se expresa también como la mentira, la ilusión, el disfraz de la nada. La muerte de Dios significa la muerte de la razón y de la metafísica.
En la concepción de la verdad y la mentira de Nietzsche subyace la idea posmoderna de los metarrelatos puesto que nos dice que la verdad se expresa también como la mentira, una idea que trasciende, que va más halla de lo que realmente en este plano de mundo no se ve.
Nietzsche advierte de la aparición de un superhombre que recuperará la grandeza perdida, la debilidad, la decadencia. Se trata del hombre superios que domine y aniquile al inferior. Se caracteriza por la falta de compasión, la fuerza, el gusto por la acción, el combate y la guerra, el desprecio por los débiles.
La filosofía de Nietzsche entraña un vitalismo puesto que antepone aquello que debe de ser, algo que es indispensable para vivir, algo que sucederá o que sucede. La transmutación de valores implica una destrucción de la filosofía y de su historia. Habla de una inversión de valores donde los valores tradicionales son cambiados por otros que se consideran superiores.
El nihilismo se separa en dos: el nihilismo pasivo que habla de la muerte de Dios, de no creer en ningún valor puesto que todo valor solo es posible si Dios existe y este no existe; y el nihilismo activo que habla de mostrar los valores dominantes y darse cuenta que se deben de cambiar, hacer unos valores nuevos, "la trasmutación de valores"
También nos habla del eterno retorno que según esta ideología, son los momento vividos y las diversas situaciones se habrán de repetir, dentro de el, el hombre encontrará sentido a su existencia. Es vivir la vida siempre lo mejor posible como si esta se fuera a repetir, puesto que debe volver a repetirse eternamente. No es un sustituto de la religión si no como una forma de vida, vivir siempre a lo máximo.

Filosofos modernos: Nietzsche, Heidegger, Vattimo y François

La modernidad empezó a gestarse después de la Edad Media. El punto de partido suele ser el Renacimiento que tuvo su foco en Italia de los siglos XV y XVI, época en la cual surgió la ciencia moderna. En el siglo XVIII, siglo del "iluminismo" La modernidad llega a un momento culminante. El proyecto ilustrado que marca las pautas de la modernidad se proponía, ante todo:
  • Desarrollar una ciencia objetiva que minimizara el poder de la magia, la superstición y la religión.
  • Impulsar una moralidad cuyos principios éticos estuvieran cifrados en la libertad, la fraternidad, la igualdad y la justicia.
  • Proporcionar una fe en leyes universales como fundamento no sólo de la moral sino también de la política, el arte y la filosofía.
  • Contribuir a la acumulación enciclopédica del conocimiento y de la cultura.
  • Realizar la secularización de la política con respecto a la época feudal en la cual se encontraba supeditada a la religión o teología.
  • Concebir la historia como un proceso lineal y ascendente.
La modernidad configura una metafísica que abriga la totalidad, la plenitud, la suma de los máximos ideales, utopías, y valores posibles, el fin y fundamento que da sentido a todo lo existente, y en particular a la existencia humana.
Esta racionalidad, esta fe en el progreso material y técnico ha entrado en crisis desde la perspectiva de los filósofos llamados "pos-modernos". Surgió en los años 30 del siglo XX. La posmodernidad entraña una desconfianza, un desencanto de la modernidad con todos sus principios, sus ideales y sus utopías.